¿Te despiertas por las mañanas con el cuello engarrotado? Vale. Tienes que hacer dos cosas: cambiar tu almohada y forma de dormir. Aquí te damos unos consejos.
Las mejores posiciones y almohadas
La mejor posición para dormir sin molestar tu cuello es:
- De lado
- De espaldas
¿Y con qué almohada? Hay varias combinaciones:
1.- Si duermes de espaldas:
- Duerme con una almohada redonda que soporte la curvatura de tu cuello y una almohada más plana que amortigue la cabeza. Puedes hacer esto metiendo dentro de tu almohada un rollo para el cuello. La almohada debe de ser de plumas suaves y el rollo para el cuello pequeño. También puedes comprar almohadas que ya tienen esto.
- Usa una almohada de plumas que se adapte a la forma de tu cuello. Ten en cuenta que deberás cambiarla cada año o así porque las almohadas de plumas pierden la forma pronto.
- También puedes probar con una almohada que tenga una ‘espuma con memoria’ que se adapte a la forma de tu cabeza y cuello. Algunas almohadas cervicales tienen ‘espuma con memoria’.
- No uses almohadas muy altas o duras.
2.- Si duermes de lado
- Mantén tu columna recta usando una almohada que es más alta sobre tu cuello que tu cabeza.
Si duermes sobre tu estómago, recuerda que es malo para tu espalda porque está arqueada y tu cuello se dobla hacia un lado. Si te has acostumbrado a dormir así, será duro cambiar tu forma de dormir pero debes intentarlo. Por lo menos intenta empezar la noche durmiendo sobre tu espalda o de lado.
Un buen sueño también importa
Distintas investigaciones médicas también sugieren que los problemas de cuello también pueden venir derivados de dormir mal, según apunta Harvard Medical School en su Harvard Health Publishing.
En un estudio realizado entre 4.140 hombres y mujeres saludables con y sin problemas para dormir se descubrió que las personas que decían que dormían regular o mal tenían mucha más tendencia a desarrollar problemas de cuello tras un año que las que decían que no tenían problemas para dormir o muy pocos.
¿Por qué? Una explicación podría ser que si duermes mal tus músculos no llegan a relajarse y, además, si te duele el cuello entonces no dormirás bien y eso hace entrar en un círculo vicioso.
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