
Esta es la historia de un almacén de muebles que se reconvirtió en un piso de 36 metros cuadrados cómodo, práctico y hermoso. El propietario quería un hogar con luz y grandes espacios. ¡Ah! y que la reforma le saliera barata. El precio no lo sabemos, pero el resultado del trabajo de la arquitecta Karin Matz es espectacular. Mira y coge ideas para tu piso.
Cocina, habitación y armario, todo en uno
El piso está en Estocolmo una ciudad donde cada metro cuenta (como en casi todos los grandes centros urbanos) y Karin Matz aprovechó cada centímetro de acuerdo al gusto de su cliente.
Dividió el piso en dos partes. La primera contiene el dormitorio, cocina, armario y zona de almacenaje, todo en una única estructura basada en las unidades de cocina de Ikea. Se rehizo todo el entramado eléctrico que se instaló dentro de las paredes y se pintaron todas las superficies de blanco para atraer y reflejar la luz.




El baño es la conexión
Las superficies del resto de la vivienda se han dejado más o menos como estaban (desde hace 20 años). Se han rellenado los agujeros de las paredes y arreglado desperfectos en pintura y papel pintado. Los cables eléctricos se han añadido por fuera de las paredes.
El baño es la conexión entre las dos partes de la casa.



Fotografías: Web de Karin Matz
Muchas gracias. Muy buenas ideas para aprovechar al máximo el espacio en un piso pequeño