Existen una serie de factores que hay que tener en cuenta para decidir cuál es el elemento que más nos conviene para tener sombra en las áreas abiertas de nuestra casa.
Antes de decidir, es necesario evaluar cómo son los espacios al aire libre. No es lo mismo si tenemos una terraza, un jardín o un patio. Es importante que sea un complemento estético, pero lo más importante es que sea funcional y no suponga un estorbo o un obstáculo.
Por ello es importante tener conciencia del tamaño y la altura necesaria, para que cumpla bien su función de dar sombra. Si vivimos en una azotea o en el campo, podremos elegir alturas muy elevadas, que nos permitan estar bajo sin tener la sensación de agobio. En ese caso es recomendable una pérgola.
Sin embargo si tenemos una terraza o un patio pequeño, quizás sea más recomendable una sombrilla, para que pueda entrar más luz y más aire y no se produzca un efecto invernadero.
Es muy importante, del mismo modo, considerar el clima que tendrá que soportar. Ya que si es un lugar húmedo se recomiendan materiales resistentes como el acero inoxidable o el PVC. Mientras que en las zonas más secas se puede usar la madera.
En lugares de lluvia, se recomienda una sombrilla, para poder cerrarla cuando sea necesario. O algo intermedio como un toldo, que puede usarse o no, según la necesidad. Hay multitud de tipos de gazebos, con estéticas más o menos modernos. Aunque los que producen una sombra más compacta son los de tela, también son los más costosos.
Actualmente también se puede comprar una gama de pérgolas o sombrilla: el dilema del veranode plástico a bajo precio, pero de buena calidad. Para los que piensen que una pérgola o sombrilla: el dilema del verano o una sombrilla pueden ser un estorbo. Un elemento intermedio que os aconsejamos es el toldo.
El inconveniente de los toldos, es que es un elemento fijo, se instala en la pared y no puede cambiarse de lugar como puede hacerse con una sombrilla o un gazebo. Sin embargo, no ocupa espacio y es posible desplegarlo cuando sea necesario sin restar ni un centímetro a nuestras zonas abiertas.
Por tanto, hay multitud de posibilidades para poder disfrutar de nuestras zonas abiertas sin pasar calor. Solo tenemos que elegir el tipo de estructura, el estilo, los materiales y a ¡disfrutar del verano!
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Jajaja, muy bueno el artículo. Es cierto que siempre estamos con dilemas. Una cosa o la otra. Y a veces yo pienso que son hasta buenos.
Para mojarnos a vuestro artículo… Mejor Pérgola siempre que se pueda. Éste verano en algunas urbanizaciones de pisos han comprado entre varios vecinos pérgolas que compartían para poner en el césped de la piscina, para así en lugar de tener 5 sombrillas entre varios, una pergola para todos. Me ha parecido una buena idea.